El espino blanco (Crataegus oxycantha et monogyna) ha sido importante en Europa durante muchos siglos y las leyendas sobre la planta dan fe de ello. Una de estas historias legendarias cuenta que la corona de espinas con que se martirizó a Jesús de Nazaret era de espino blanco. Sus principios activos tienen un efecto positivo sobre la función cardíaca y la circulación, y protegenel corazón del desgaste prematuro. Las personas mayores en particular pueden beneficiarse de los efectos del espino blanco.

Una forma fácil de utilizarlo es beber la infusión Puedes preparar un extracto de espino blanco a partir de hojas, flores y frutas. Si quieres, incluso puedes aprender a cosechar la planta y preparar tu infusión con materia prima fresca.

Infusión de espino a base de flores y hojas

En primavera, el espino muestra sus exuberantes flores blancas. Durante este tiempo, las hojas y las flores se cosechan al mismo tiempo, porque entonces el contenido de principios activos en las hojas es más alto. Para hacer esto, quítale las puntas de los brotes con las uñas o con unas tijeras pequeñas y recójelas en una bolsa o una cesta.

Cuando llegues a casa, coloca las flores y las hojas en un lugar sombreado para que se sequen. La mejor manera es extendiéndolas sobre un paño o periódico. No las coloques en un lugar con corriente de aire porque saldrán volando. Se pueden mantener estando completamente secas, selladas herméticamente, por ejemplo en frascos de cristal con tapón de rosca, hasta la próxima primavera.

Si no tienes un arbusto de espino en tu propio jardín, o en una maceta en el balcón, busca algún arbusto por un bosque cercano, si no, siempre te queda la opción de comprar la planta ya seca en la herboristería. Recuerda que si vas al bosque a cosechar no se debe notar que has pasado por allí. Coge lo mínimo, lo suficiente para tu uso personal durante un periodo corto de tiempo.

Para hacer una infusión con flores y hojas:

Ingredientes:

  • 2 cucharaditas de flores y hojas frescas o una cucharadita de hojas secas
  • 250 mililitros de agua

Elaboración:

  1. Pon las hojas frescas o secas en una taza.
  2. Anadee el agua hirviendo, cubre la taza con un platito y déjala reposar de cinco a diez minutos.
  3. Pasa la infusión por un colador y ya está lista para tomar.

Se pueden beber de dos a tres tazas de infusión a lo largo del día. Después de tomarla durante unas ocho semanas, es aconsejable hacer un descanso de dos semanas.

Dependiendo de los síntomas, la infusión de espino se puede mezclar con otras plantas medicinales, como agripalma o jiaogulan para problemas cardíacos o lavanda y valeriana para problemas de nerviosismo y sueño.

Infusión de bayas de espino

El espino no solo es aprovechable en primavera, sino también en otoño. Una vez que las flores se han marchitado, los frutos no tardan en madurar y ser utilizables. Cuando las bayas son de color rojo brillante, harinosas y ligeramente dulces es el mejor momento para cosecharlas. Una vez que las hayas secado, estas bayas las puedes almacenar durante mucho tiempo y utilizarlas durante todo el año.

Cómo preparar una infusión de bayas de espino blanco:

Ingredientes:

  • 1 cucharada de bayas de espino blanco
  • 250 ml de agua

Elaboración:

  1. Toma una cucharada de bayas en una taza o una cacerola pequeña y vierta 250 ml de agua tibia encima.
  2. Tapa la olla y déjalas en remojo durante doce horas, preferiblemente durante toda la noche.
  3. Al día siguiente, hierve el agua de remojo junto con las bayas y luego déjalo reposar durante cinco minutos.
  4. Ya solo queda colarla y tomarla. Es preferible tomarla tibia.

Propiedades de la infusión de espino blanco

Por supuesto, cualquier síntoma que tengas debes consultarlo con un médico y no esperar a que el espino blanco lo solucione. Una vez tengas un diagnóstico, la planta te puede resultar de ayuda.

Con sus propiedades favorecedoras de la circulación sanguínea y la regulación de la presión arterial, el espino fortalece el corazón y puede aliviar muchos problemas cardiacos. Se puede utilizar como ayuda en caso de palpitaciones, dolores y arritmias cardíacas leves. Además, contrarresta la presión arterial alta y baja, así como los trastornos circulatorios y la sensación de presión y opresión en la zona del corazón.

La infusión de espino también tiene un efecto calmante sobre los dolores de cabeza, migrañas, trastornos del sueño y nerviosismo durante la menopausia.