Gente disfrutando de los picos soleados de las montañas, en paisajes nevados o frente a un lago de montaña, no pasa un día sin que se carguen miles de fotos y vídeos impresionantes en Instagram, TikTok y otras redes sociales. El senderismo está absolutamente de moda, pero debe realizarse con conciencia para no dañar la naturaleza.

1. Busca montañas cercanas

Por supuesto, si haces un trekking por el Himalaya vas a provocar admiraciones y sanas envidias, pero te vas a tener que desplazar en avión miles de kilómetros, con el consiguiente impacto sobre la atmósfera y el cambio climático.

Vale la pena patearse los campos y montañas más cercanas a tu domicilio, que a menudo poseen atractivos que no imaginas. Y si puedes llegar en tren o en bicicleta, mejor que hacerlo en coche. Así podrás presumir de practicar senderismo consciente y sostenible.

Si la única manera de llegar a tu destino es en coche, que al menos vaya totalmente ocupado.

2. ¿Hace falta que te disfraces de senderista?

Hasta el senderismo y el disfrute de la naturaleza se toman como una oportunidad para el consumismo.

No hace falta ninguna ropa deportiva especial, aparte de unas buenas botas, para practicar este deporte, y mucho menos prendas sintéticas con tejidos derivados del petróleo.

Utiliza la mochila y la ropa que ya tengas y no contribuirás a la contaminación y el impacto climático causados por las industrias textiles. Piensa que rehusar un kilo ahorra la emisión de 25 kilos de CO2.

3. Compórtate como un buen huésped de la naturaleza

Disfrutar de la naturaleza es todo lo contrario de abusar de ella. Las plantas, los animales y las piedras no están ahí para que los molestemos. La regla básica es: que no se note que has pasado por allí.

Antes de visitar un espacio natural valioso, por ejemplo, un parque nacional o una reserva de la biosfera, vale la pena informarse a fondo. Así podrás reconocer las maravillas que de otro modo te podrían pasar desapercibidas, y también adquirirás conocimiento sobre cómo no molestar a las especies más sensibles. Por ejemplo, en los lugares donde nidifican las aves no hacen ningún bien que te acerques demasiado o que hagas ruido.

En general, no conviene alejarse de los caminos para no pillar por sorpresa a animales que no esperan tu visita.

4. También vale la pena proteger a otras personas

Dondequiera que vayamos en masa, también molestamos a nuestros semejantes. En general, muchas regiones de senderismo están preparadas para la avalancha de masas turísticas, pero muchos "lugares turísticos" han perdido su originalidad hace mucho tiempo.

Por lo tanto, es una buena idea buscar regiones que estén menos en el foco de la industria de viajes y del turismo masificado.

5. Cómo proteger la naturaleza mientras haces senderismo

Para que podamos disfrutar de la hermosa naturaleza durante el mayor tiempo posible, podemos incorporar en nuestro hábitos los siguientes consejos:

  • Llévate la basura contigo y nunca dejes envoltorios de comida o pañuelos en la naturaleza. Esto también se aplica a los desechos supuestamente naturales, como las cáscaras de plátano u otras frutas exóticas que no son adecuadas para los animales autóctonos.
  • Puedes llevar refrigerios saludables como manzanas, peras o zanahorias, para no tener que llevar contigo ningún embalaje.
  • Si tienes más hambre sobre la marcha, lo mejor es guardar tu merienda en loncheras de metal, madera o vidrio, o simplemente envolver el bocadillo en papel vegetal.
  • Puedes hacer tus propias barritas de muesli para tomar una dosis extra de energía entre comidas, en lugar de comprar barritas energéticas envueltas en plástico individualmente.
  • Si vas de excursión es obligatorio que lleves agua. Las mejores botellas desde el punto de vista ambiental y la salud son las de cristal y las de acero, pero si te resultan muy pesadas también puedes recurrir a las Tritán y polipropileno, libres de bisfenoles y otros disyuntores endocrinos.
  • Las fotos son el mejor recordatorio de la caminata: no recojas flores que van a tener una vida muy corta en tu casa.