Presionar ciertos puntos del rostro permite recuperar la calma al instante. Primero se masajea un lado de la cara siguiendo el orden numérico y a continuación el otro. Seguidamente intentamos percibir la diferencia entre cómo nos sentíamos antes y después del masaje.
La secuencia
- Dibuja círculos desde el nacimiento del pelo al entrecejo.
- A media distancia entre la raíz del pelo y las cejas, presiona haciendo círculos.
- Junto al lagrimal, sobre el tabique nasal, haz movimientos circulares con el dedo pulgar.
- Al final de la ceja, junto a la sien, dibuja círculos hacia fuera con el dedo corazón.
- Un poco más abajo, en el extremo externo del ojo, traza círculos hacia fuera con el dedo corazón, sin despegarlo de la piel.
- Bajo el ojo, presiona en círculos con el dedo índice.
- Presiona bajo el pómulo a la altura de las fosas nasales.
- Entre la nariz y el labio, presiona formando círculos.
- Describe pequeños círculos bajo el labio.
- Presiona suavemente trazando círculos sobre la articulación de la mandíbula.