El sueño lúcido es aquel en que se puede controlar lo que sucede. Durante el sueño, los soñadores lúcidos son plenamente conscientes de que están soñando y pueden dar la forma que deseen a las imágenes oníricas.

La investigación del sueño ha demostrado que las áreas frontales del cerebro son significativamente más activas durante la fase de sueño REM en personas que dominan los sueños lúcidos.

Estas áreas del cerebro son las principales responsables de la evaluación crítica y la evaluación de la situación, una señal de que los soñadores son conscientes de una manera similar al estado de vigilia.

En un estudio de 2009, los investigadores encontraron que los sueños lúcidos a menudo ocurren hacia el final del ciclo de sueño y pueden caracterizarse como un tipo de estado híbrido entre el sueño y la vigilia.

Pesadillas y estrés postraumático

En la investigación se asume que el sueño lúcido, utilizado terapéuticamente, puede tener efectos muy positivos en la salud mental del soñador. Las personas que sufren pesadillas regulares y recurrentes pueden recurrir a los sueños lúcidos para resolver miedos o traumas subconscientes.

Para las personas afectadas por el trastorno de estrés postraumático, los sueños lúcidos pueden ser una ayuda real en la recuperación de la salud emocional y mental. Las personas que sufren este problema acostumbran a experimentar pesadillas, y si dominan la técnica de los sueños lúcidos pueden salir de ellas.

Algunas personas que dominan las técnicas para disfrutar de sueños lúcidos pueden utilizarlas para resolver problemas de la vida real, representar acciones y probar escenarios en tiempo real.

Aprender a tener sueños lúcidos paso a paso

Los sueños lúcidos resultan algo natural y espontáneo para algunas personas. Para alcanzar el estado de sueño lúcido, algunas personas no necesitan nada más que quedarse dormidos.

Los jóvenes tienen sueños lúcidos con mayor frecuencia y regularidad que las personas con cerebros maduros. Pero incluso aquellas personas que ya no sueñan lúcidamente o que no recuerdan sus sueños en absoluto pueden aprender a soñar lúcidamente con algunos trucos.

1. Llama a la consciencia

Antes de dormir, prográmate para intervenir y hacerte una pregunta en cuanto estés soñando: "¿esto es solo un sueño?" Simplemente haciendo esta pregunta, los soñadores pueden despertar su conciencia sin salir del estado onírico. Para no vivir pasivamente un sueño, es importante reconocer que estás soñando.

Para tener la oportunidad de hacernos la pregunta, reconoce los signos típicos de los sueños que solo parecen razonables y normales en ese estado, pero que son completamente fantásticos en estado de vigilia.

Flotar, volar o moverse de manera extremadamente torpe, como caminando a través de una gelatina, son signos clásicos de que se está soñando. Una vez que los hayas reconocido como tales, puedes preguntarte activamente: "¿Es todo esto solo un sueño?"

2. Mantén un diario de sueños

Si no recordamos los sueño es porque hemos dejado de prestarles atención.

Probablemente a ti también te pasa que poco después de despertarte, todavía puedes recordar claramente un sueño que acabas de vivir, pero solo durante unos minutos, después, los delicados hilos del sueño parecen haberse disuelto por completo.

Si deseas aprender a dar forma activamente a tus sueños, primero debes crear un inventario de tus propios mundos oníricos. ¿De qué otra manera vas a obtener control sobre algo que ni siquiera conoces?

Así que mantén un diario de sueños justo al lado de tu cama. Tan pronto como te despiertes, escribe todo lo que recuerdes sobre tu sueño.

Al principio las experiencias oníricas serán muy confusas, incoherentes e incompletas. Sin embargo, con el tiempo aprenderás a recordar más detalles.

Una vez que tengas un inventario completo de tu mundo onírico, te resultará más fácil reconocer las señales de los sueños y lograr claridad, consciencia, en ellos.

3. Provoca sueños lúcidos

Los sueños lúcidos suelen tener lugar durante la fase de sueño REM, es decir, al final del ciclo de sueño. El reino de los sueños lúcidos se encuentra en el límite entre las fases de sueño y vigilia.

Por lo tanto, puedes provocar sueños lúcidos con un simple truco:

  • Programa un despertador que suene unas cinco horas después de cuando normalmente te quedas dormida. Si todo sale según lo planeado, te despertarás del sueño REM
  • Mantente despierta durante unos minutos, lee algunas páginas de tu libro o hojea tu diario de sueños
  • Si te vuelves a dormir ahora, las posibilidades de tener sueños lúcidos son mucho mayores, ya que tu cerebro activo pasa directamente al sueño REM

4. La práctica hace al soñador

No se aprende a controlar los sueños de la noche a la mañana. Los sueños lúcidos requieren práctica y tiempo. Ten un poco de paciencia contigo mismo y no pierdas la esperanza. A veces se necesitan varias semanas o incluso meses antes de tener éxito con los sueños lúcidos por primera vez.

Asegúrate de mantener una dieta saludable sin alcohol ni nicotina y haz suficiente ejercicio. Porque eso asegura un sueño saludable y profundo, lo que facilitará tu proyecto.

Cuando seas capaz de tener sueños lúcidos, créalos solo esporádicamente, pues al parecer el descanso se ve afectado. La mayor parte de tus sueño deben ser como los de toda la vida, completamente imprevistos y sorprendentes.

Referencias científicas: